Participar en un proyecto europeo es muy gratificante para cualquier empresa, autónomo o institución. El pasado 20 de Julio, la Comisión Europea ha publicado una gran parte de las convocatorias anuales del séptimo Programa Marco (7th Framework Programme, FP7 son las siglas oficiales en inglés). Todas las convocatorias están indexadas en el calendario de AccioBit y los programas de trabajo de cada una de ellas enlazados en el calendario de ayudas.
¿Qué beneficios se pueden sacar de un proyecto europeo?
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Tener acceso al conocimiento desde su fuente.
Participando en un proyecto colaborativo puedo ver cómo trabajar otras entidades similares a la mía y conocer sus procesos internos de una forma única, tener acceso a un conocimiento que no podria tener de otra forma.
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Enseñar lo que sabes hacer.
Estos proyectos permiten compartir el conocimiento, compararse con los otros socios y muchas veces sorprenderse, viendo que estamos mucho mejor de lo que pensábamos en ciertos aspectos técnicos. Fue el caso de SITIBSA con su participación en el proyecto Medisolae, donde pudo comprobar que en las discusiones técnicas sobre temas GIS tenían mucha más experiencia que cualquiera de los otros socios profesores de universidades griegas o alemanas y ¡fue una gran satisfacción personal!
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Permitir que te conozcan.
Estar en un proyecto europeo es un lugar idóneo para hacer networking, encontrar nuevos socios que te podrían permitir desarrollar nuevos productos, iniciar relaciones con posibles distribuidores o representantes en el extranjero.
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Aumentar las posibilidades de que te llamen en el futuro.
Si los socios te ven como una empresa cumplidora y pro-activa es muy probable que te vuelve a llamar para proyectos futuros que sean con financiación o sin, porque no hay que cambiar una fórmula que funciona.
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Extender tu mercado geográficamente.
A partir de estos nuevos conocimientos generados puedes extender tu mercado hacia un nuevo horizonte aunque sea un proceso muy lento. Miquel Fluxà, dueño de Camper, dijo “Nos ha costado más de 20 años internacionalizarnos”, por lo tanto ¡te da tiempo de sobra presentar uno o varios proyectos europeos!
¿Por dónde empezar?
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Tener una idea de proyecto innovadora que pueda tener un ámbito de aplicación sin frontera.
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Buscar los socios imprescindibles para alcanzar el mejor resultado.
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Buscar la convocatoria adecuada para presentar la idea. Hay que fijarse en las letras mas pequeñas, tanto a nivel de elegibilidad de cada socio, de la temática del proyecto, del tamaño del proyecto según el número de socio, el presupuesto, el impacto del proyecto y su duración en el tiempo.
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Tener la disponibilidad financiera para la parte no financiada.
Existen muchas tipologías de proyectos y programas de ayudas, es importante conocerlos para saber cual se adecua a nuestras necesidades.
Fuente: CDTI, 2010.
La fundación IBIT lleva mas de 10 años participando en proyectos de ámbito nacional, europeo y internacional y seguimos con los ojos puestos en las últimas convocatorias publicadas y abiertos a colaborar con PYMES y/o entidades públicas de las Illes Balears siempre que estén acordes con nuestras líneas de investigación.